¿Cómo saber si ha llegado el momento de cambiar el sofá?

Estamos seguros de que estás de acuerdo con nosotros: El sofá es el mueble principal de todo el salón, confidente de muchas anécdotas y nuestro mejor amigo tras una intensa jornada de trabajo fuera de casa. Sí, existen pocas sensaciones tan satisfactorias como acostarse en el sofá tras un largo día. Pero lo cierto es que, aunque no le prestes atención, el tiempo pasa y tu sofá se desgasta. 

Si sientes que tu sofá ya no es lo que era o estás pensando en adquirir uno nuevo, a continuación vamos a darte unos tipos para saber si ha llegado el momento de cambiar el sofá. ¡Sigue leyendo! 

La edad de tu sofá
Normalmente, una vez que tu sofá ha cumplido 10 años o más, es momento de replantearse el adquirir uno nuevo. Es posible que no presente ningún síntoma como hundimiento o pérdida de la forma, pero es solo cuestión de poco tiempo que estos aparezcan. 

Si es el momento de jubilarlo, aprovecha para renovar la decoración de tu salón para darle un toque más moderno. Siempre hace ilusión estrenar nuevo sofá y decorarlo con complementos como cojines y mantas, sobre todo ahora para la época de invierno. 


El sofá se hunde
Este es el primer “síntoma”. Si al sentarte en tu sofá sientes que se hunde más de lo habitual es señal de que las espumas de los asientos han perdido firmeza. Con el paso del tiempo, estos van cediendo por su uso. 

Con la carga del peso, los rellenos del sofá se van deteriorando poco a poco. Estos pierden comodidad y amortiguación, puede que lo hayas notado en que es imposible que recuperen su forma original una vez que te levantas. 
Las gomas elásticas o las cinchas que se encuentran en el sofá para dar apoyo en los asientos también influyen. Revisa tu sofá para comprobar si están en buen estado, si están con muy poca firmeza quiere decir que se han soltado del bastidor por rotura de las mismas. 

Resortes y muelles metálicos
Otro motivo por lo que tu sofá está en mal estado podría estar relacionado con los resortes y los muelles metálicos. Estos ofrecen amortiguación y soporte para el momento en el que te sientas pero es casi seguro que con el paso del tiempo estos tiendan a perder firmeza y se aflojen. 
Puedes comprobarlo examinando tu sofá, a lo mejor algún resorte se ha salido de su lugar, están flojos o alguno de ellos se ha doblado. 

Problemas con el tapizado
Además de existir problemas con la estructura o el relleno de tu sofá, el tapizado también es una parte importante de este. 
Los problemas más comunes con el tapizado son: desgaste en las zonas de más contacto, pérdida de color, manchas imposibles de quitar, malos olores, roturas en las costuras…
Si tu problema está relacionado con el tapizado, desde Armazones te recomendamos cambiar directamente de sofá, ya que volver a tapizar el sofá por completo puede ser algo bastante costoso. 

Encárganos tu sofá ideal
En FP Armazones fabricamos cualquier tipo de armazón compuesto de madera de pino y tableros, para su posterior tapizado. Todos los armazones de sofá que nuestros clientes necesiten serán realizados teniendo en cuenta principios como la resistencia, la durabilidad del producto, y el aprovechamiento del material, ya que queremos ofrecer la mejor de las estructuras de sofá a nuestros clientes. Nos adaptamos a las necesidades y formas de trabajo del cliente. Con una muestra, plano, o archivo para diseño asistido por ordenador, es suficiente para empezar a dar forma al esqueleto del sofá.